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Aroca pone el foco en las consecuencias que el proceso colonizador en Latinoamérica ha tenido sobre el constructo identitario de sus sociedades e individuos. Explora las posibilidades que las estéticas decoloniales le ofrecen para identificar lo disruptivo que dicho proceso es para la relación hombre- naturaleza. Una horizontalidad simbiótica preexistente que se trunca con la llegada del logo euro centrista, y del mismo modo que la naturaleza pasa a ser un recurso en lugar de un igual, esta memoria inmaterial se disloca y desvirtúa. Con su ejercicio artístico Álvaro construye un relato basado en esa cosmología cuasi olvidada, dando lugar a un nuevo código que se apoya en los grafismos recuperados de la memoria natural que persiste. Signos con los que diseña los  maravillosos bordados de sus textiles y en los que plasma el resultado del
trabajo de investigación realizado con la comunidad originaria de Surinam en Ámsterdam. En sus instalaciones incluye piezas de video-performance relacionando esta desmemoria de lo natural con la fragmentación del andamiaje identitario, social y personal. Piezas en las que trabaja con el cuerpo la huella psicológica dejada por esta mirada impuesta unilateralmente, euro centrista y excluyente.
 

 

Iñigo Rodríguez Román

Comisario arte contemporáneo – investigador

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